Por Gillian MacBeth-Louthan
Enero 2020
A medida que el universo se expande para adaptarse a su magnífico ser, les pide a todas sus creaciones que se conviertan en más. Para recibir más, para crear más. Para ser más, se expande más allá de los potenciales anteriores. Un gran pulso cósmico late dentro del corazón galáctico y se siente dentro del corazón de todo lo que vive. Las declaraciones de expansión se escuchan alto y claro a través del tiempo y el espacio.
Cada pensamiento es como una pieza de reloj que atrae su atención inmediata. Cada minuto que pasa es como un cheque de regalo cósmico para ser gastado en el lugar de elección en la calle del deseo. Las cantidades y denominaciones de este cheque de regalo están estructuradas y definidas para adaptarse a la Tierra y a sus créditos de vida. A medida que el pulso de la luz se intensifica en proporción a los resultados deseados, desplaza su percepción consciente a través del tiempo para observar todas y cada una de sus creaciones para ver cómo emplean su fuerza vital sabia o tontamente; beneficiando a todos o simplemente rindiéndose homenaje a sí mismas. Si se ve como beneficioso, entonces se agregan mayores dominios de luz al límite de crédito cósmico.
Lo que es reducido en tiempo y valor también se multiplica y expande. Las opciones se ven abiertamente por lo que cosecharán. Ocultar cualquier cosa no es una opción. Una longitud de onda evolutiva en proporción directa al pulso del creador se siente a nivel celular dentro del circuito biológico de cuanto tiene vida. El tiempo, alguna vez obstruido, se ve por su flexibilidad; inclinarse hacia adelante o hacia atrás requiere la misma energía. A medida que la humanidad cambie su percepción consciente de qué es el espacio y el tiempo, se liberará de los grilletes de las elecciones pasadas que continúan restringiendo. Las moléculas de la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad siempre avanzan a través del tiempo y el espacio sin dudarlo. Los resultados están diseñados por la especie, a medida que eligen avanzar o quedarse.
La humanidad tiene la capacidad innata de volverse como los "maestros" ante los que se inclina energéticamente. La imagen grabada se cambia de forma permanente. Recibir el poder de Cristo es la clave de esta verdad, ya que lo que vino antes viene de nuevo. Las estrellas y galaxias viven dentro del cuerpo humano y el ADN. Son cautivas estelares de la materia que piden ser liberadas para convertirse en lo que nacieron para ser. Dejen que el universo que vive dentro de ustedes se convierta en su verdadero valor, mientras buscan comprender su verdadera valía. El universo avanza con o sin ustedes. Nuevos programas y determinadas propiedades de creaciones de bioluminiscencia están emergiendo del tiempo creando nuevas oportunidades para que la luz se exprese a sí misma. La finalización de los viejos programas comienza rápidamente a medida que los nuevos códigos se emiten a la humanidad a través del pulso cósmico. Aquellos que busquen con ahínco serán enaltecidos. Todo se amplifica a medida que viene y va.
Las formas de pensamiento de la luz son recolectadas, reevaluadas y enviadas para crear nuevos mundos. Todos serán responsables de cómo han empleado su luz. En el pasado, los dones espirituales se atrofiaron ya que muchos tipos de energías competían con el hombre por su espacio y su tiempo perpetuo.
Como la gravedad, el electromagnetismo y otras energías vinculadas al cambio de las antiguas normas, ellos no adhieren a las reglas de la física terrenal. Las leyes científicas se fragmentan y reacomodan a medida que el espacio, el tiempo y la Tierra se alteran. La energía se transfiere de un lado al otro a través del tiempo y entre puntos de iniciación estelar. La humanidad libera la necesidad de un orden espacial a medida que baila ante una nueva reverberación del tiempo. Las improntas electroquímicas y bioquímicas se han transferido a moradas sagradas.
Un gran regalo espera a quienes han sido lo suficientemente fuertes como para permanecer en el camino de la luz durante la involución y evolución del mismo. Los dones de lo sagrado llegarán a un punto de saturación y madurez. La conciencia de la luz se transmitirá desde una fuente independiente, permitiendo que una inteligencia superior sea imbuida en aquellos que buscan saber. Las viejas formas de pensar se disolverán y muchas limitaciones anticuadas se disolverán con ellas.
Se generarán nuevas formas de pensamiento a una velocidad superlativa que dará vida a todos los pensamientos y palabras. Se utilizará un arco de luz para unir otras inteligencias estelares que están alineadas con los nuevos códigos de Cristo. Las semillas divinas que temían brotar ahora echan raíces en este elevado ambiente de luz que alberga un profundo amor universal. Al vivir en un lugar de luz, revestida de una prenda de amor, la humanidad podrá ser capaz de superar la valla del espacio-tiempo e ir a un lugar de nuevos códigos de energía que traerán una consumación que no se puede lograr de otra manera.
Los mensajeros de luz en forma de espiral vienen a liberar al hombre de una existencia lineal, abriendo las puertas del tiempo (pasado y presente) para que la humanidad pueda tener una visión clara de las elecciones a tomar. Las claves de las estrellas se dan en respuesta al clamor del futuro de que la humanidad necesita otra oportunidad para demostrar ser merecedora de esta luz. Una vez más, a la humanidad se le mostrará cómo salvarse de un sombrío futuro autoinducido.
Gillian MacBeth-Louthan
PO box 217
Dandridge, Tennessee
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