16 abr 2014

SEMILLAS CELESTIALES


Según lo recibió Gillian MacBeth-Louthan - Abril del 2014


A medida que la primavera se abre camino finalmente a través de un vórtice invernal más bien duro, las brisas cálidas y las lluvias de abril dan rienda suelta a lo que está oculto dentro de la vida; todo lo que ha estado latente durante varios meses cobra vida ahora: semillas, sueños, esperanzas.  Dentro de la semilla de la vida vive un patrón dinámico en una Totalidad Divina.  Dentro del patrón está la evolución completa y la realización de cada especie. 

Dentro de una única semilla del gran roble vive su potencial más pleno. Está destinada a volverse todo en lo que ella se puede volver, al igual que nosotros.  Esa semilla no contiene la mitad de una instrucción, sino que contiene el Universo entero.  Dentro de la semilla de cada ser humano viven las mismas instrucciones, un patrón Divino completo que alberga el potencial ilimitado de cada persona. Cada humano tiene la capacidad de cumplir con estas instrucciones en su plenitud.  Es una elección personal; es una Directiva Divina. 

A medida que la primavera llega a la cumbre de su belleza, es tiempo de que cada persona se tome un tiempo para plantar una nueva idea, una nueva semilla, un nuevo deseo, un nuevo sueño; entonces sepan sin lugar a dudas que la semilla llegará a su fase de completación porque ella sostiene la plenitud del florecer.  No planten nada en su vida si dudan de su habilidad de florecer, ya sea una semilla de pasto, la semilla de una flor o la de un árbol.  Si ustedes dudan de su habilidad para cumplir con su potencial, entonces no la planten del todo.  La naturaleza les pide que planten por lo menos una semilla en su mundo. Planten esta semilla con un saber sin diluir de que ella alcanzará su pleno potencial. Planten la semilla a sabiendas de que va a madurar y alcanzar su destinación, o no la planten del todo. Toda vida sostiene la enteridad de su potencial. 

A medida que ustedes avanzan a una mayor conciencia de cocreadores, surge la pregunta: ¿son ustedes un Dios de medio tiempo o un humano dudoso de tiempo completo? ¿dudan más de sí mismos durante más horas de las que creen en sí mismos?  ¿desearían acaso que su Creador trabajara de tal desordenada manera?  Con la llegada de la primavera planten sus sueños y sus esperanzas en el fértil suelo del sistema de creencias.  Crean en que se van a cumplir, o no las planten del todo.  Ya sea una semilla de pasto o un sueño humano, ellas necesitan ser plantadas en un suelo fértil.  Cada semilla que planten representa un compromiso celestial.  Planten como lo hace el Creador, sin dudar. 



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